La Gran Estafa ll
Entre 70 y 100 millones de dólares es la estafa impulsada por el presidente. Los números de un hecho sin precedente, las posibles consecuencias para la Argentina y los vínculos del presidente con la empresa creadora de $LIBRA. ¿El mandatario sabía o no que era una estafa? Por: Jonathan Raed Entre las 19:01 y las 00:38 de la noche del viernes 14 de febrero de 2025, el presidente de la Nación Javier Milei impulsó y promocionó una estafa virtual que afectó a miles de personas alrededor del mundo. Fueron más de 5 horas y media en las cuales los más fieles seguidores libertarios rogaban a las fuerzas del cielo que se tratara de un hackeo a las cuentas de redes sociales del máximo responsable del Estado argentino. Ocurre que si no era un hackeo, era una estafa. Sin embargo, no hubo hackeo.
Primero, allegados al presidente lo confirmaron; luego, el propio Milei,
quien acusó que «no estaba interiorizado» en lo que previamente
difundió como un «incentivo a la economía argentina» y mantuvo como tuit
fijado (una manera de destacar el posteo) durante el citado lapso de
tiempo.
Los números de la estafa. Con la estafa ya consumada, Milei
borró el posteo y acusó desconocimiento. ¿Cuántas personas fueron
estafadas y por qué monto total? ¿Quién se llevó la plata? Estas
preguntas no tienen por el momento una respuesta definitiva, pero sí hay
cálculos estimativos. Al desempeño de la criptomoneda, se le puede dar
seguimiento minuto a minuto. Tras el anuncio de Milei, el valor el
mercado virtual llegó a alcanzar los 5 dólares por unidad. Horas más
tarde, se desplomó a menos de 1 dólar. En ese lapso, quien compró y
vendió se hizo de un buen dinero. En la jerga, se conoce a esta estafa
como «rug pull«. Los que entran primero, ganan; los que quedan colgados,
pierden. Los creadores de la cripto compran por montos mínimos su
propia moneda; luego, buscan la forma de impulsarla (pagando a famosos
que la promuevan, por ejemplo) y, una vez alcanzado el ingreso deseado
de compradores, abandonan repentinamente para llevarse los fondos de los
estafados. Como la operación es anónima, no se puede saber (al menos,
sin una investigación a fondo) quién compró y/o vendió. El propio Milei
podría ser un operador o no. Es una cuestión de fe.
En las horas que
duró la aventura, compraron $LIBRA más de 40 mil personas de distintas
partes del mundo. Se movieron más de 1.500 millones de dólares. La
moneda alcanzó una capitalización de casi 4 mil millones de dólares y, a
la hora del «cash out (retirar el dinero)», los creadores/ganadores se
llevaron entre 70 y 100 millones de dólares. Especialistas en la
materia, de hecho, coinciden en un número más concreto: 87.4 millones de
dólares de ganancia, en un rato.
¿Milei sabía que era una estafa?
Por el momento, es imposible determinar si el presidente argentino
estaba o no al tanto de si se trataba de una estafa. Sin embargo, hay
algunos indicios que pueden dar pie a una investigación. El programador y
periodista Maximiliano Firtman detalló en un hilo de Twitter algunos
puntos clave: «La web del proyecto y la criptomoneda se crearon unas
horas antes de la publicación, lo que marca una clara organización con
día y hora en que el presidente tenía que publicarlo. No fue un mensaje
que al pasar se publicó o que vio y le pareció interesante. Parece
claramente orquestrado»; «El presidente no retuiteó la publicación o el
anuncio de la empresa, fue él el que anunció el proyecto desde la nada«;
«El mensaje implícito era: para apoyar a Argentina hay que comprar esta
cripto que luego (sin avisar cómo) va a invertir en proyectos en el
país»; «El presidente incluyó la dirección del contrato inteligente de
la criptomoneda (sería como dejar el CBU)».
En el mismo sentido, el
periodista Bruno Bimbi apuntó: «Hasta el exacto segundo en que Milei
tuiteó la estafa, los únicos que sabían de la existencia de esa cripto
eran los estafadores que la crearon. Y en el exacto segundo en que Milei
tuiteó empezaron a mover el dinero. Fue coordinado. El presidente es un
delincuente».
Sin el tuit, no hubiera sido posible concretar la
estafa. Con o sin conocimiento de causa, la participación del presidente
fue necesaria para poder llevar a cabo la acción. No es la primera vez
que Milei se ve envuelto en un hecho de estas características, ya que
algo parecido ocurrió cuando era diputado nacional.
La gran estafa
Milei
presentó la criptomoneda $LIBRA como un proyecto privado de inversión
en empresas argentinas. Luego de la promoción del presidente, el valor
de la criptomoneda se disparó, ya que aumentó en gran número la demanda;
es decir, hubo fuertes compras de la misma.
El emprendedor,
especialista en la materia y simpatizante de Milei, Santiago Siri,
explicó: «Cuando Milei anuncia este proyecto, el 70 por ciento de las
monedas está en manos de tres direcciones. Si abrís un proyecto para
fomentar pymes, hay que hacer el proceso para que sea transparente. La
gran mayoría de estas personas no sabemos quiénes son y hubo muchas
desprolijidades en todo esto que se armó».
Los primeros compradores
son usualmente los creadores de la moneda. «Compran» por 0 dólares y
luego ven hasta dónde llega el valor. Usualmente, entre el 15% del total
se encuentra en manos de los creadores; esta vez, fue el 70%, y en
apenas 3 personas. «Vimos que sin poner un peso se llevaban cuatro o
cinco o seis millones de dólares«, alertó Siri, en diálogo con Diario
con vos, en AM 530.
«Milei es un fenómeno global y esta moneda tocó
un techo de capitalización del mercado casi cuatro mil millones de
dólares en cuatro horas, pero después en las siguientes cuatro horas se
desplomó a casi cero. Milei lo hizo siendo presidente de la Nación y
está obligado por la ley de ética pública a informar, a dar
transparencia y datos sobre los hechos», completó.
Las consecuencias para la Argentina
El
extitular de la Unidad de Información Financiera (UIF), José «Pepe»
Sbattella habló al respecto de la estafa con Te aviso con Tiempo, en la
radio de las Madres de Plaza de Mayo: «Implica una acción política de la
UIF para saber cómo se movió la plata y mostrar qué fue lo que pasó con
esto.
Todo quedó registrado y, tanto acá como en otros lugares del
mundo, las características de cumplimiento las fijan los organismos
fiscales. Puede implicar que Argentina vuelva a integrar la lista gris».
«Todo
lo que pase por acá puede ser sospechado de ilícito. Pone a la
Argentina en un estado de vulnerabilidad para que se convierta en un
paraíso fiscal y libertinaje financiero. Las reservas de Argentina ya
están depositadas en Londres, los activos ya pasaron a estar en una
jurisdicción que es el corazón de la city global. Argentina ya se
entregó a que los desastres que produzca la administración Milei tienen
una garantía de que las reservas están en otra jurisdicción», alertó
Sbatella.
Finalmente, completó: «Tiene que haber juicio político y
pedido con sentencia final. Esto no es normal, que un presidente
incentive la compra de una cripto y en horas se convierte en una estafa.
Todo el camino se puede ver y los beneficiarios finales pueden ser
identificados. Por eso, hay que pedir el juicio político».
Los lazos de Milei con la empresa creadora de $LIBRA
La
empresa que desarrolló $LIBRA -la cripto de la estafa que tuvo al
presidente argentino como impulsor- se llama KIP Protocol y mantiene aún
los posteos de lanzamiento de la moneda. La empresa, creada en 2019,
salió a desligar a Milei de la acción y no dio mayores explicaciones, al
igual que el propio Milei.
KIP Protocol mantiene acuerdos con la
Ciudad de Buenos Aires y en octubre último sus directivos mantuvieron
reuniones con el presidente Milei, y hasta se compartieron imágenes del
encuentro con su CEO, Julian Peh (foto que ilustra el artículo), en el
marco del Foro Tech de Argentina.
Queda en manos de la justicia,
nacional y/o internacional, determinar si el economista y presidente
argentino Javier Milei estaba o no en conocimiento de que se trataba de
una estafa.